Riken Yamamoto gana el Premio Pritzker 2024

John Hill
5. marzo 2024
Riken Yamamoto (Foto: Tom Welsh. Todas las imágenes son cortesía del Pritzker Architecture Prize).

El anuncio de hoy seguramente ha sorprendido a la gente que predecía el ganador del Premio Pritzker, dado que Riken Yamamoto no es un nombre tan conocido como los demás arquitectos — Bjarke Ingels, Jeanne Gang, Steven Holl, Kengo Kuma, etc. —  que acaban encabezando las encuestas para "el mayor honor de la arquitectura". La posición de Alejandro Aravena, galardonado con el Pritzker en 2016, como presidente del jurado ha impulsado el premio hacia una arquitectura con mayor conciencia social, al menos con los premios a Francis Kéré en 2022 y a Anne Lacaton y Jean-Philippe Vassal el año anterior, pero el premio del año pasado a David Chipperfield demostró que el Pritzker todavía puede ir a un arquitecto famoso que diseñe espacios culturales — anteriormente el pilar del Pritzker y de otros premios de arquitectura. Si hay que deducir alguna tendencia del anuncio de hoy, al menos a primera vista, es el prolongado atractivo de la arquitectura japonesa y el papel ocasional del Pritzker como premio a toda una carrera: Yamamoto, el noveno galardonado de Japón, tiene 78 años, mientras que Arata Isozaki tenía 87 cuando ganó el premio en 2019 y Balkrishna Doshi tenía 90 cuando ganó el año anterior.

¿Quién es Riken Yamamoto? Nacido en Pekín en 1945, su familia se trasladó a Yokohama poco después de la II Guerra Mundial. La carrera de Yamamoto como arquitecto se inició con una visita al templo Kôfuku-ji de Nara, "cautivado por la Pagoda de los Cinco Pisos, que simboliza los cinco elementos budistas: tierra, agua, fuego, aire y espacio", según la biografía Pritzker sobre el arquitecto. "Estaba muy oscuro", dijo, "pero pude ver la torre de madera iluminada por la luz de la luna y lo que encontré en ese momento fue mi primera experiencia con la arquitectura". Tras licenciarse en 1968 en la Universidad de Nihon, Departamento de Arquitectura de la Facultad de Ciencia y Tecnología, Yamamoto obtuvo Master of Arts en Arquitectura en la Universidad de las Artes de Tokio en 1971. Dos años después fundó Riken Yamamoto & Field Shop.

Villa Yamakawa, Nagano, 1977 (Foto: Tomio Ohashi)

La cita del jurado (véase al final de este artículo) y otros textos oficiales del premio enmarcan la concesión del Pritzker de este año a Yamamoto en términos de dualidades que ha sabido navegar y enlazar: lo público y lo privado; el individuo y la sociedad; la construcción y el paisaje. Así, incluso sus primeros viajes por el mundo -por Europa y el norte de África, Estados Unidos y Sudamérica, y Oriente Medio- se articulan en cómo le ayudaron a descubrir la idea de que "un 'umbral' entre los espacios públicos y privados era universal": "Reconozco que el pasado sistema de arquitectura es para que podamos encontrar nuestra cultura", dijo. "Los pueblos eran diferentes en su aspecto, pero sus mundos [eran] muy parecidos".

La biografía continúa: "Yamamoto reconsideró los límites entre los ámbitos público y privado como oportunidades sociales, comprometiéndose con la creencia de que todos los espacios pueden enriquecer y servir a la consideración de toda una comunidad, y no sólo de quienes los ocupan". Como la mayoría de los arquitectos, sus ideas encontraron traducción primero en casas unifamiliares, como la Villa Yamakawa en Nagano (1977), que consta de habitaciones cerradas y terrazas abiertas bajo un gran tejado a dos aguas, y Gazebo (1986), la propia casa del arquitecto en Yokohama. Esta última, un edificio de cuatro plantas con muros de hormigón y una estructura de acero vista, está caracterizada por un gran tejadillo abovedado, bajo el cual Yamamoto da de comer a su pez dorado, limpia la caja de arena del gato e intercambia saludos matutinos con la anciana vecina: "La vida cotidiana de la comunidad local", escribe en su página web, "tiene lugar a unos cuatro pisos por encima del nivel del suelo".

GAZEBO, Yokohama, 1986 (Foto: Ryuji Miyamoto)

Yamamoto empezó a recibir encargos para otro tipo de proyectos en la década de 1980, y uno de los primeros fue Rotunda, un edificio de uso mixto en Yokohama muy cerca de su propia casa. Con tiendas y oficinas en las plantas inferiores y un par de residencias en la superior, el edificio expresa sus funciones mediante una base relativamente sólida y una marquesina curva que cubre los espacios exteriores para las residencias. El concepto se extendió a Hotakubo Housing, un proyecto de viviendas sociales construido en Kumamoto en 1991, donde los edificios de cinco plantas están dispuestos alrededor de un patio central y rematados por marquesinas metálicas abovedadas.

Viviendas Htakubo, Kumamoto, 1991 (Foto: Tomio Ohashi)

A partir de ahí, los edificios de Riken Yamamoto & Field Shop crecieron en escala y diversidad, abarcando desde residencias privadas a viviendas públicas, desde escuelas primarias a edificios universitarios, y desde instituciones a espacios cívicos, compartiendo todos ellos una preferencia por la transparencia, "en forma, material y filosofía", según el Premio Pritzker. Algunos ejemplos notables son la Universidad Prefectural de Saitama (1999), la Futura Universidad de Hakodate (2000), el CODAN Shinonome Canal Court (2003) en Tokio, el SOHO Jian Wai (2004) en Pekín, el Museo de Arte de Yokosuka (2006), Pangyo Housing (2010) en Seongnam, Corea, la Tianjin LIbrary (2012) en Tianjin, China, y THE CIRCLE en el aeropuerto de Zúrich (2020).

Universidad Prefectural de Saitama, 1999 (Foto: Tomio Ohashi)
Futura Universidad de Hakodate, Hokkaido, 2000 (Foto: Isao Aihara)
Shinonome Canal Court CODAN, Tokio, 2003 (Foto: Tomio Ohashi)
ian Wai SOHO, Pekín, 2004 (Foto: Tomio Ohashi)
Museo de Arte de Yokosuka, Kanagawa, 2006 (Foto: Tomio Ohashi)
Pangyo Housing, Seongnam, Korea, 2010 (Photo: Kouichi Satake)
Biblioteca de Tianjin, Tianjin, China, 2012 (Foto: Nacasa & Partners)
THE CIRCLE en el aeropuerto de Zúrich, 2020 (Foto: Flughafen Zürich AG)

Cita del jurado

El Premio Pritzker se concede en reconocimiento a aquellas cualidades de talento, visión y compromiso que han producido de forma persistente contribuciones significativas a la humanidad y al entorno construido a través del arte de la arquitectura. En su larga, coherente y rigurosa carrera, Riken Yamamoto ha conseguido que la arquitectura sea a la vez el fondo y el primer plano de la vida cotidiana, difuminando los límites entre sus dimensiones pública y privada, y multiplicando las oportunidades de encuentro espontáneo entre las personas, mediante estrategias de diseño precisas y racionales.

Mediante la calidad sólida y coherente de sus edificios, pretende dignificar, mejorar y enriquecer la vida de las personas —desde los niños hasta los ancianos— y sus vínculos sociales. Y lo hace a través de una arquitectura autoexplicativa pero modesta y pertinente, con honestidad estructural y una escala precisa, con una cuidadosa atención al paisaje del entorno.

Su arquitectura expresa claramente sus creencias a través de la estructura modular y la sencillez de su forma. Sin embargo, no impone actividades, sino que permite a las personas configurar sus propias vidas dentro de sus edificios con elegancia, normalidad, poesía y alegría.

Riken Yamamoto se compromete deliberadamente con la más amplia gama de tipos de edificios, así como de escalas, en los proyectos que elige. Tanto si diseña casas privadas como infraestructuras públicas, escuelas o parques de bomberos, ayuntamientos o museos, la dimensión común y de convivencia está siempre presente. Su atención constante, cuidadosa y sustancial a la comunidad ha generado sistemas de espacios públicos de interfuncionamiento que incentivan a la gente a reunirse de diferentes maneras. Todo el espacio del edificio de la Universidad Prefectural de Saitama (1999), por ejemplo, se concibe como una comunidad.

Yamamoto sugiere, más que impone, esta dimensión compartida mediante intervenciones arquitectónicas discretas pero precisas. Al incluir espacios para actividades comunes, además e incluso independientemente de la función principal de sus edificios, permite que éstos se integren en la vida cotidiana de la comunidad, en vez de experimentarse sólo en circunstancias excepcionales. Los dos departamentos para que estudiantes e investigadores trabajen juntos en la Universidad del Futuro de Hakodate (2000), o la fachada transparente de lamas de cristal para exponer el funcionamiento interno del departamento en el Parque de Bomberos de Hiroshima (2000) ejemplifican su creencia en el concepto de transparencia como reflejo de la funcionalidad y accesibilidad del espacio tanto para los usuarios como para los observadores.

Como joven arquitecto nacido en China y formado en Japón, sintió la urgencia de completar su propia educación con una comprensión real del "otro que el yo". Viajó mucho, no (principalmente) para visitar monumentos de renombre, sino para conocer de primera mano la cultura y la vida cotidiana de comunidades de otros continentes. Desde América del Norte a América del Sur, pasando por el Mediterráneo, Oriente Medio y Asia, Yamamoto ha investigado las raíces y la historia de la vida comunitaria para poder aportar su propia contribución a la modernización de la ciudad contemporánea a través de la arquitectura. Para él, un edificio tiene una función pública aunque sea privado.

Riken Yamamoto no es un historiador de la arquitectura, pero aprende del pasado y de diferentes culturas. Como arquitecto, no copia del pasado, sino que adapta, reutiliza y evoluciona, demostrando que los fundamentos persisten en su relevancia. Yamamoto ha ampliado la caja de herramientas de la profesión tanto hacia el pasado como hacia el futuro para poder dar cada vez, de modos muy diferentes y a escalas muy distintas, la respuesta más pertinente a los retos tanto del entorno construido como de la vida colectiva.

Por crear conciencia en la comunidad de lo que es responsabilidad de la demanda social, por cuestionar la disciplina de la arquitectura para calibrar cada respuesta arquitectónica individual y, sobre todo, por recordarnos que en arquitectura, como en democracia, los espacios deben ser creados por la voluntad de la gente, Riken Yamamoto es nombrado Premio Pritzker 2024.

[Fuente]

 

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