Gelato Collection: una heladería que fusiona gastronomía y perfumería
En la intersección entre la alta gastronomía y el mundo de la perfumería, nace Gelato Collection, un concepto ideado por el chef Albert Adrià que reinterpreta la experiencia de la heladería tradicional. La propuesta, concebida como una colección en constante evolución de sabores numerados, encuentra su materialización en un espacio diseñado por el estudio barcelonés EL EQUIPO CREATIVO, con quienes Adrià ha trabajado en proyectos previos como Tickets, La Dolça y Pakta.
Ubicado en la centralísima Rambla de Barcelona, el local se aleja de la estética convencional de las heladerías y toma referencias del universo de las perfumerías y joyerías, creando un ambiente donde el producto adquiere un papel central. El diseño busca generar un equilibrio entre contrastes: frío y cálido, minimalismo y sofisticación.
El material que define la identidad del espacio es el gres porcelánico de gran formato, elegido por sus propiedades estéticas y funcionales. Con piezas de 300x100 cm, se logra minimizar la presencia de juntas, otorgando continuidad a las superficies. Sin embargo, su mayor aporte radica en su acabado: un tono champán con una textura que reacciona sutilmente a la luz, generando un efecto de movimiento que evoca la cremosidad del helado.
El porcelánico seleccionado pertenece a la colección Luce Gold de Matimex, una propuesta del diseñador Guillermo Mariotto para el grupo italiano Iris Ceramica. Su acabado metálico, lejos de ser una simple superficie decorativa, dialoga con el resto de materiales, estableciendo un contraste entre la frialdad de la vitrina y la calidez del entorno.
Otro de los materiales clave en el diseño es el vidrio texturizado, utilizado tanto en la vitrina de helados como en las luminarias decorativas. La vitrina, concebida como un punto focal del espacio, está revestida con vidrios acanalados que refuerzan la sensación de frescura y enmarcan los colores de los helados. La elección de este material remite a la idea de un objeto cuidadosamente presentado, similar a un frasco de perfume o un estuche de joyería, reforzando la identidad conceptual del proyecto.
En conjunto, la selección de materiales y el diseño espacial buscan generar una experiencia sensorial que va más allá del sabor, conectando la tradición gastronómica con un imaginario de lujo y exclusividad, con un enfoque que reinterpreta la heladería desde una nueva perspectiva.